Una regular producción y mala clasificación
Lo bueno de las malas películas, es que son buenas para explicar cosas. Según varias bases de datos
cinematográficas, la película First Born y traducida como Obsesión Maternal en
México y Primogénito en otros países, es de terror o thriller sicológico, sin
embargo, encuadra más en el drama. Desde el nombre nunca supieron como encuadrar la cinta. Esta clasificación quizá se le dio para
elevar su taquilla o como una franca equivocación por el uso de la música como
agente preparante a la
sorpresa y otros recursos muy básicos del terror. No es terror pues no existe
transformación física de ningún ser vivo, característica esencial para
adquirir tal clase. Tampoco es un thriller pues no existe ninguna tensión entre
personajes ni siquiera ficticia. No existen persecuciones ni confrontaciones de
ideas entre héroes y
villanos. De este modo, ha sido una cinta pésimamente clasificada. Quizá sea en venganza porque no supieron tampoco recibir asesoría criminal sobre la clasificación del mal del que pensaban hablar, pues como veremos confunde esquizofrenia con psicosis temporal.
Con duración de 95 minutos, fue realizada
en Estados Unidos bajo la dirección del mediano Isaac Webbs, un
director de poca producción en cine y más conocido por producciones para la
televisión; bajo la musicalización de John Frizzell, un abusador de los efectos preparantes y
con y la fotografía de Alejandro Martínez, quizá lo mejor de la película. Tiene un
reparto «decoroso», destacando la actuación de Elizabeth Shue,
mejor conocida como la novia del Karate Kid y que ha tenido otras participaciones en
cintas comerciales. Otros son Steven Mackintosh, Kathleen Chalfant, Khandi Alexander, Anne Wolf
de menor alcance
en el
medio de la farándula jolivudense.
La historia de historias inverosímiles
La
película trata de un mujer que suspende sus actividades profesionales
relacionadas, al parecer, con la danza porque resulta embarazada tal como lo
quería. Se lo comunica a su esposo, un hombre muy ocupado que apenas tiene
tiempo para platicar con ella y lo único que logra acordar con ella es que se
cambiarán por fin de casa, a una mansión retirada de la ciudad que
no necesariamente resulta acorde al perfil de profesionistas que ambos tienen.
Antes del nacimiento ella tiene algunas obsesiones y cuando nace acaban por
aflorar. No se aleja su sentimiento de soledad por más que trata de
relacionarse con las pocas personas que tiene a su alcance, como su madre con
quien habla por teléfono de su síntomas que en todo momento son minimizados; la
despachadora del super y su
perro a quien acaba asesinando por poner veneno para ratones en el combate a
las imaginarias plagas que habitan sólo en su cerebro. Entre la soledad, la
genética heredada de su madre que siempre le dice que la maternidad es un
suplicio dando a entender que vivió episodios similares, y su propio mal, se
dedica a practicar obsesiones que van desde manipular su cabello, ya sea
colorándolo cuando lo ve canoso, o cortándolo cuando lo ve cayendo. La
tristeza avanza a depresión y la depresión a locura cuando lleva sus obsesiones
al plano mental y compara a su hijo con un muñeco. Tiene sensaciones que le
molestan y trata de comentarlo con su madre y con otras personas para quienes
las conductas bastante evidentes resultan indiferentes. El esposo preocupado
por algunos eventos contrata a una nana quien comienza a cuidar a la niña
generando peores conductas en la mujer, ya sea celos o desconfianza. Hay varios
hechos en
los que la imaginación de la mujer relaciona con la nana y comienza a creer que
la nana quiere hacerle daño a su hijo. Todo se conjuga en un fin fatal.
Una
película sobradamente mala, desde el punto de vista cinematográfico,
con distintos problemas de exposición. A pesar de contar con un buen elenco pero
más asociado
a la televisión que al cine, y buenas tomas fotográficas con guión que es tan malo que comienza a contar muchas historias que uno
esperaría que se conectaran en algún momento y nunca las termina, como el caso del
diario de una supuesta mujer que vivió ahí pero que al final confirmamos
nuestra sospecha de que ella misma lo escribía, pero no resuelve nada que el
espectador no pueda resolver por el mismo. Si se quita el diario o se ponen otros cinco no pasa nada. Ni dice que cuenta el diario, ni si
tiene algo que ver con su mal y solo hace quedar mal al asesor científico de la
cinta quien confunde la ezquizofrenia con
la psicosis temporal. El guión resulta exitoso e al contar la historia
esencial, pero le pasa como a los niños pequeños cuando quieren contar algo muy
emocionante, se empieza a trabar con detalles importantes para el escritor y de
absoluta intrascendencia para el observador. Así, una pordiosera
que no
aporta ni a la historia ni a la fotografía ni a nada, absolutamente nada,
escupe frente
a un restaurante,
el experto en ratones
no
logra cazar nada
y tampoco logra decir que no hay ningún rastro de animales, pero si logra
encontrar el diario que por algún motivo la mujer esconde de manera totalmente
injustificada pues si es psicótica temporal no tiene la argumentación
suficiente para esconderlo, mucho menos abajo del refrigerador. Por otro lado
hay algunos problemas de calidad de la continuidad, que nos conecta escenas muy
distintas de manera muy brusca sin una razón aparente, brincando de la
adquisición mágica de una mansión a la convivencia con el bebé.
Nunca
se nos dice como una pareja que se transportaba en taxi, de un día a otro tiene
para adquirir una mansión digna de el Sha de Irán. Si era porque necesitaban de
una alberca para ahogar al muñeco, bastaba con la tina del baño. El músico de
la película es uno de los principales responsables de esta tragedia fílmica a
quien no le informaron que la cinta es un drama y busca generar terror
artificial preparando al espectador en escenas obvias como la muerte del perro. Porque siendo francos, en este mundo que con trabajo a alguien le importa lo que le pase a otra persona, que puede importar que muera un perro que ni siquiera ha hecho sinergia con el espectador. Tratando de usar la música de terror como muletilla, no logra intrigar ni
generar emociones. La película está repleta de numerosas distracciones con
nuevos e innumerables personajes y algo de pérdida de foco con la trama
esencial. Presenta dibujos incompletos de los personajes pero con excesos de
trazos. Sabemos una y otra vez que el marido es muy ocupado como sabemos una y
otra vez que hay una antigua habitante, y una y otra vez que la madre le heredó
en cierta forma el mal a su hija. Sabemos muchas cosas inconexas, y la
diferencia entre una mala película y una buena, es que en la buena, al final
algo conecta todos los datos, no es el caso.
La asesoría
sicológica anda por los suelos, pues según el material existente que está
autorizado en la materia, en la sicosis no se aprecian muchos procesos de culpa
y en la protagonista de la película casi no hay otra cosa que culpa. Si bien
podría ser una excepción nunca nos dice porque esta psicosis no debiera llevar
culpa. Los cual nos hace pensar que el escritor es el típico redactor que no se
preocupa por ingresar a la sicología de los personajes o leerse uno que otro artículo científico. Tampoco nos explica
como es posible que ninguno de los profesionistas de los sanatorios de lujo
donde da a luz (pues el esposo es muy pudiente) se dan cuenta de los síntomas,
siendo que en la actualidad existen gran cantidad de recursos diagnósticos que a la menor provocación del paciente salen hasta en el peor hospital, más
aún si una de las doctoras está embarazada. Simplemente no es aceptable pensar
que pudiera pasar desapercibida la conducta de la paciente. Tampoco nos dice
como una mujer de 44 años puede dar a luz tan fácilmente sin ningún tipo de
tratamiento, ni liga esta irregularidad con los otros datos, en estas condiciones sería un embarazo de alto riesgo: quizá el más vigilado de los Estados Unidos, y
la casualidad se impone, los caza ratones encuentran cuadernos, pero los
doctores con todos los exámenes no encuentran un diagnóstico obvio cuyo simple
diagnóstico evitaría el fatal desenlace. Estos aspectos desde el punto
argumental son tan graves que ya ni siquiera nos preguntamos otros:
¿cómo hacen una instalación invisible para una cámara?
¿cómo hacen una instalación invisible para una cámara?
¿cómo la protagonista anda en la lluvia y
no se moja?
¿por qué si había trampas para ratón el perro prefirió el veneno si
la trampa despide mejor olor?
¿por qué si el marido era tan desinteresado había
dos globos de corazón en el cuarto de hospital, los llevo el amante? ¿estaban incluidos en
el precio?
Más otros detalles que en proporción no tienen ninguna importancia.
En conclusión es una cinta muy mala en lo artístico, documental y en general.
Sin embargo nos enseña como no se debe clasificar un desorden postparto. Veamos, existen tres niveles de desordenes
psicológicos postparto:
Bluebirth
La entidad conocida en
inglés como baby
blues o embarazo
triste, que tienen del 50 al 75 % de las madres en
alguna medida. Es cuando
la mujer siente tristeza por factores exógenos después del
parto. Es decir, por hechos que justifican la tristeza, como los cambios de
vida que impactarán en su vida. Si dejará la mujer de estudiar, trabajar o irá
a vivir a otro lado, o si por el parto ha sufrido cambios en su cuerpo que
impacten en su belleza, o porque no puede completar sus horas de sueño o su
dieta acostumbrada, o ha tenido que dejar algún vicio como el cigarro o alguna
afición como el deporte o las salidas con amigos. Estos cambios son externos y
existen, la tristeza se puede solucionar o aceptando el cambio por medio de
sicoterapia, yoga o técnicas alternativas o bien cambiando la realidad y
haciendo compatible el parto con los cambios. No representa riesgo y por lo
general puede ser tratada con éxito.
Depresión post parto
Ya considerada de gravedad y de riesgo,
esta a fección que
ataca al 10% de las madres primerizas, consiste en los síntomas de la depresión
pero asignados a la etiología del parto, es decir, causados por el parto,
durante el cual cambia el metabolismo de la mujer y por ello no puede asimilar
ciertas sustancias o generar determinadas encimas que normalmente tienen bajo
relativo control los. A diferencia del embarazo triste esto no se debe a las
condiciones externas syino a
toda la bioquímica que ocurre en la mujer. Esa bióquímica se puede cambiar con medicamento y la
tristeza que genera con las mismas técnicas del embarazo triste. Si no se trata
puede evolucionar a psicosis dependiendo del perfil de la persona.
Psicosis postparto
La piscosis post
parto es una entidad médica psiquiátrica y ginecológica considerada de extrema
gravedad pues puede llegar a ser irreversible y poner en peligro la vida del
bebé, de la madre y de familiares. Según la película ataca a 1 entre mil madres
pero en estudios científicos se refleja una incidencia de 1 entre 500 (Twoney: http://www.amazon.com/Understanding-Postpartum-Psychosis-Temporary-Madness/dp/0313353468/ref=sr_1_1?ie=UTF8&qid=1388466137&sr=8-1&keywords=twomey+teresa). La
enfermedad transcurre con agitación, confusión, insomnio, alucinaciones, manía y
pensamientos de suicidio o asesinato. Es la mayor explicación de madres que
matan a sus bebés, un hecho que el sentido común podría decirnos que es
imposible y que no es tan infrecuente. El hecho es de tal gravedad y no es
suficientemente tratado (pues ni siquiera el DMSIV lo aborda en una categoría
específica) que existe una asociación internacional encargada de su tratamiento
(la Postpartum Support
International: http://postpartum.net/)
Los
principales síntomas son:
Sentirse triste o deprimida,
irritable o enojada con quienes rodean a la
mujer afectada, dificultad para interactuar con
el bebé, con
ansiedad o pánico, con problemas para dormir, molesta con pensamientos que parecen imposibles de retirar de
la mente, fuera de
control o sentirse a bordo de
la locura, sintiendo que preferiría nunca llegar a ser mujer, preocupada por lastimar al bebé.
Los síntomas pueden ocurrir en cualquier edad o raza dentro de
los primeros 12 meses al nacimiento del bebé. Hay
otros desórdenes postparto con que no debe confundirse la sicósis, como la ansiedad postparto, el desorden obsesivo compulsivo post
parto, el estress post
traumático post
parto. La diferencia es muy clara y estriba sobre todo a que en
la psicosis queda en peligro la vida de las personas. La psicosis requiere tratamiento inmediato con la aparición de varios de
los síntomas. Además hay ciertos síntomas inconfundibles como la pérdida de memoria, la confusión y la alucinación con certeza de realidad sobre todo de tipo acústico y paranoia
Hay muchas mujeres que se recuperan
solas, otras llevan los síntomas en silencio y otras más acaban con hechos
fatales. Las que se encuentran en un estado límite no necesariamente están más
seguras pues tienen la capacidad para ocultar sus síntomas pareciendo normales
y dejando al bebé en mayor riesgo.
Se trata de una enfermedad rara comparada con los otros desordenes postparto,
la disimbolidad de sus síntomas, precisamente proveniente del desajuste
hormonal cuyos valores suben y bajan, hace quizá más dificil su determinación, pues hay hiperactividad con tristeza, manía con depresión, alucinaciones con lucidez. Somnolencia con insomnio. Preocupación por el bebé con olvido.
Los principales factores de riezgo de la psicosis postparto son el desorden bipolar en la familia, episodios psicóticos previos. Otros factores son
la Edad,
la existencia de depresión, y esto se puede aunar con condiciones ambientales
como soledad, la genética, que el parto sea de primer hijo, mala atención
médica y abandono de las actividades rutinarias que hacen más agudos los
cambios debidos
En cuanto al pronóstico no tratado, el 5% acaban en suicidio o con la muerte del bebé por infanticidio. Con
tratamiento la enfermedad no debe progresar y se regresa casi siempre a la
normalidad.
Una desafortunada secuencia:
La
Señora Davis tiene sus actividades rutinarias que incluyen su baile
profesional. Ssta un poco arriba de los 40 años y descubre que está embarazada.
Ese embarazo es deseado y cuando lo descubre la da alegría. Busca comunicarlo
rápidamente a su esposo, compra varios diagnósticos caseros.
Sin
embargo en numerosas ocasiones comienza a tener ideas fijas e imágenes que
identifica como reales pero que no cuadran con la lógica, como imágenes de
muñecos de bebés abandonados. Podemos identificar que inician algunos rastros
de tristeza de parto, pues cambiará este su vida.
Le
ocurren hechos que tienen gran importancia como el ataque verbal de una
pordiosera, pero le angustian mucho. Ella
con su esposo, se mudan a una residencia en las afueras de la ciudad, con gran
lujo pero que acaba por aislarla, aumentando sus angustias. Continua con sus
obsesiones de observación con cámaras de vigilancia maternal, lo cual parece
indicar que está interesada por su hijo. Antes del nacimiento sigue asociando
imágenes de bebes a aspectos terribles que le hacen sentir angustia. Aquí ya se
identifican algunos aspectos de desordenes compulsivos del parto y quizá
depresión alimentada por la soledad.
Dentro de sus obsesiones se encuentran
aspectos típicos de limpieza disfrazados de la creencia de que cohabita con un
ratón. Así va al super a
comprar sobredosis de veneno para plagas y con ello cobra su primera víctima.
Parker su perro muere envenena sin que quede claro si existía o no un ratón o
rata. En esta parte ocurre algo inusual en la psicosis
Sin embargo en numerosas ocasiones
comienza a tener ideas fijas e imágenes que identifica como reales pero que no
cuadran con la lógica, como imágenes de muñecos de bebés abandonados.
Una
gran culpa la embarga cuando muere su perro, esto no es tan congruente con los
procesos psicóticos. Nos da a entender
que tiene dos personalidades Añadido
a su estrés y angustia, se presenta un compañero que realmente no la acompaña.
NI siquiera en la sala del hospital es para entrar y apoyarla.. Habla con su
esposo pero el realmente no analiza la situación por la que ella atraviesa,
haciendo que la enfermedad curse todas sus etapas. En el hospital la visita sin
respaldo, solo como acto de presencia.
Cuando
nace el bebe lo hace con muy ligeras complicaciones, pero ninguna de real
importancia solamente se marca el nacimiento por cesárea. Hasta aquí hay un
acercamiento de la madre. Pero ella comienza a observar que aunque tiene un
esposo, este es solamente una figura decorativa, se fe comparada con las
mujeres que tienen esposos participativos y esto le genera trisiteza pos
parto..
Al
principio sólo hay algunas alteraciones sobre olvidos con respecto al bebé, la
mujer comienza a sentir algunos molestias y pide tímidamente ayuda a la madre a
quien le pregunta que sentía cuando ella nació. La madre irresponsablemente en
vez de sugerirle que vaya con un médico le dice que durante el parto es normal
sentir molestias. Esto implica que la madre también tuvo síntomas de desagrado
durante el parto y se aprecia la carga genética del mal. También nos permite
ver como un factor preparante que
la persona
esté rodeada de gente con poca información .Aunque los síntomas eran obvios
nadie logró detectarlos, ni el marido, ni la madre.
Sus
ideas fijas comienzan a agravarse, lleva a un experto en ratones yía soledad
de la casa le hace estallar teniendo uno de sus primeros síntomas cuando se
aterra en el jardín a lver un muñeco.Quizá en
ese momento pasa de la depresión a la sicosis post parto.Lo ´punico que
no cuadra es que siempre siente culpa, siendo que eso no es común en las
psicosis.
Comienza a asignar interpretaciones
propias a hechos fortuitos como el del diario. Recuerda su vida cuando era
normal, con diarios y esto incrementa las causales externas incrementando sus
probabilidades de consolidar la sicosis.
Cuando aprecia que está envejeciendo como
cuando se observa una cana, desata una crisis .
Al verse que los signos se repiten,
hace algunos intentos por separarlos de su vida, como tirando al muñeco al
agua. Pero los signos por ser tan comunes se multimplican y ella los aprecia como signos hacia ella, como el libro de
maldiciones.
Los sucesos van teniendo importancia que
se sale de la vida privada. La policía llega a la casa.
Los efectos del mal son transitorios y no
recuerda por l oque va
dejando los signos que complican la situación y retroalimentan su mal. Como el
cuchillo que olvida lo recoge la nana y posterioormente ella
cree que quiere agredir a su hijo. Los problemas se van convirtiendo en
obstáculos familiares. El esposo parece no darse cuenta.
Los signos corporales propios del
embarazado como la caida del cabello o los propios de la
edad como el encanecimiento le aterran y asume conductas exageradas como la
compra de productos
El mal se transforma en alucinatorio,
trascendiendo de lo que pudo ser depresión y a pesar de haber tenido contacto
con los médicos no lo detectan.
Después de todos los hechos evidentes e inequivocos y de
haber pasado de la babyblue, y
la depresión post parto, casi casi como en libro de texto, no le parece
suficiente a la médica y duda «quizá tenga psicosis post parto», esto es más
incongruente si se aprecia que la médica está embarazada y debe tener mucho
mayor información del problema. La paciente regresa a su casa, con
aparente tranquilidad, ya con su esposo de vacaciones y su madre a la
que siempre consulta de visita, y medicada regresa a casa con aparente
tranquilidad.
Tiene recuerdos de su actividad
profesional y aún medicada (debemos suponer que fue medicada pues salió del
hospital con un diagnóstico grave) sigue teniendo alucinaciones, confunde al
muñeco con su hija lo cual más bie n raya con la esquizofrenia que con la
psicosis la cual es argumental y no solamente sensorial. Se aprecia que ella es
la autora del supuesto cuaderno de notas y asesina a su hija. Esta parte es muy
poco creíble pues
con la medicación según la información disponible sobre la enfermedad se
detiene el transcurso de
la misma, deteniendo las falsas percepciones. Lo que describen entonces más que
psicosis postparto sería una esquizofrenia crónica y no transitoria que es una
de las principales características de la entidad postparto.
Como vemos, la película es más mala que el mismo Caligula. Parece una improvisación y tiene errores a más no poder. Confundir exquizofrenia,
doble personalidad y locura con psicosis postparto. Los
argumentos que presenta para defender la psicosis postparto son congruentes con
los que presenta la ciencia médica, angustia, depresión, tristeza,
comportamiento erróneo, sentimientos encontrados contra el hijo y otras
personas, y al final alucinaciones. Todo
el mal debió haberse controlado con la atención médica, no había ninguna
necesidad de dudar el diagnóstico, pues de haberla medicado se hubieran
contenido. Finalmente la enseñanza de esta película es como la falta de asesoría a un director le resulta en una broma.
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